BPh es un acrónimo de hiperplasia benigna de próstata. Básicamente, significa próstata agrandada. Es una enfermedad que afecta a la mayoría de los hombres a medida que envejecen. La principal queja de estos hombres son las frecuentes visitas nocturnas al baño para orinar. Existe un nuevo tratamiento no quirúrgico para esta afección que se denomina PAE o embolización de la arteria prostática. Según un estudio presentado en la 38ª Reunión Científica Anual de la Sociedad de Radiología Intervencionista en Nueva Orleans, la PAE es un tratamiento mínimamente invasivo y no quirúrgico que puede reducir el tamaño de la próstata y aliviar los síntomas. Los primeros resultados del primer ensayo prospectivo de PAE en Estados Unidos mostraron que reduce el flujo sanguíneo a la próstata y provoca su encogimiento. Se trata de una noticia muy interesante, ya que los medicamentos tienen un valor limitado en el tratamiento de la HBP. Las intervenciones quirúrgicas utilizadas habitualmente para tratar la HBP no sólo pueden ser arriesgadas, sino que también pueden provocar efectos secundarios importantes. La alternativa mínimamente invasiva del tratamiento PAE parece reducir los síntomas en una abrumadora mayoría de hombres. De hecho, 13 de los 14 hombres que se sometieron a PAE notaron una disminución significativa de los síntomas al cabo de 1 mes. Ninguno tuvo complicaciones importantes y la mayoría volvió a casa el mismo día del tratamiento. Los participantes en el estudio informaron de un efecto de cambio en el estilo de vida tras el tratamiento. Algunos pudieron suspender por completo la medicación. Para obtener más información sobre la HBP y otros problemas de salud masculina, incluido el realce del pene, visite https://www.loriamedical.com.