¿Cuánto sabes sobre los preservativos? Seguro que sabes que son un método anticonceptivo, pero hay mucho más que saber. Por ejemplo, como método anticonceptivo, un preservativo de látex tiene una tasa de fallo del 2% con un uso perfecto, pero el uso típico produce una tasa de fallo del 15%. Si se utiliza correctamente, el preservativo de látex ofrece una protección eficaz contra las ETS, pero no así el de piel de cordero. Si se es alérgico al látex, también se puede utilizar un preservativo de poliuretano. El uso de un lubricante a base de aceite puede debilitar el preservativo y hacer que se rompa. Los lubricantes solubles en agua, como K-Y, deben utilizarse con preservativos. Siempre debes pellizcar la punta del preservativo antes de desenrollarlo, y retirarlo inmediatamente después de la eyaculación para evitar que el preservativo se deslice y se produzca una posible fuga de eyaculado. Ese preservativo que llevas en la cartera puede no ser la mejor idea, ya que el calor puede debilitarlo. Deben guardarse en lugares frescos y secos. También tienen fecha de caducidad, así que asegúrate de comprobarla antes de utilizarlos. Un preservativo de tamaño estándar debería ser suficiente para la mayoría de los hombres, pero existen tamaños más grandes y más ajustados. Lo importante es que quede bien ajustado. Un preservativo flojo puede causar problemas. Lo más importante es que NUNCA utilices un preservativo dos veces. Una vez y listo debería ser tu lema. Otra ronda = otro preservativo. Si ese preservativo estándar te queda flojo, visita nuestro sitio web para obtener información sobre el alargamiento del pene.